NIÑOS DE LA CALLE
Nacen con el hambre y el pecado bajo el brazo,
con la desdicha encima esos niños de la calle.
Nacen destetados sin siquiera haber soñado el derecho de ser amamantados, cobijados, acariciados por unos brazos que yacen fríos...muertos.
Llegan al mundo culpables, juzgados, sin oportunidad alguna,
en total desventaja con la vida y el derecho de piso,
sólo guiados por el instinto natural de no querer morir, de sufrir para vivir, para reír.
Niños solos y desolados, engendrados por lujurias, por mil padres,
y la única madre, si la única madre ¡por Dios santo nadie sabe!
Pero el creador es Grande, es amor, y siempre tendrá una caricia suave para esos pobres niños de la calle.
Modesto Zepeda, Jr
(Toda obra de Modesto Iván Zepeda Jr © 2014 conserva sus derechos reservados) 4/11/14
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