Oscar Eduardo Flores Sánchez
.
AQUEL DESPERTAR
Cuantas veces he sembrado mi jardín,
desde aquella vez en que una dama,
se tomo la atribución de abrazarme a su pecho,
y en un susurro emocionante fui invitado,
a mi primera vez hacer realidad el sueño,
de beber la miel en los labios de una bella mujer,
y un cuerpo candente que consumía mi mente.
La bella dama me estaba haciendo conocer el sexo,
y mis casi nulas prácticas naturales al descubierto,
quedaron elocuentes cuando la miré acostada,
desnuda totalmente como una pintura célebre,
brindándome toda su gallardía femenina a la que,
en principio sólo atiné a acariciar sus hermosos senos,
y luego me tomaba con sus piernas y su jardín acaricié.
Mientras me besaba y bebía el néctar que su pasión,
comunicaba a mi sexo enarbolado como nunca lo sentí,
toda la magia de lo prohibido y encantador que un joven,
adolescente pueda sentir estando sobre la mujer que,
quería hacerme crecer y madurar como hombre,
al dejarme hacer todo lo que mi mente me mandaba,
sin saber si estaba bien, pero la naturaleza… es la naturaleza.
En esa experiencia de frenesí y loca pasión,
desperté con una luz de un nuevo amanecer,
a las ansias de seguir amándola creyendo estar enamorado,
pero fue duro mi despertar… cuando me aclaró,
abrazándome fuerte nuevamente a su pecho,
“Yo tan solo buscaba que me dieras tu fuerza de principiante,
Y que mi cuerpo se satisficiera de ti y tus ansias de querer amar”.
Hoy y mirando en la distancia,
Aún la recuerdo y de lo brillante,
intemperante amanecer sexual (Agradecido).
Oskyflors
oskyflors@yahoo.com.ar
Marzo 29. 2014
Derechos Reservados del Autor 2014
San Juan – REPÚBLICA ARGENTINA.
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AQUEL DESPERTAR
Cuantas veces he sembrado mi jardín,
desde aquella vez en que una dama,
se tomo la atribución de abrazarme a su pecho,
y en un susurro emocionante fui invitado,
a mi primera vez hacer realidad el sueño,
de beber la miel en los labios de una bella mujer,
y un cuerpo candente que consumía mi mente.
La bella dama me estaba haciendo conocer el sexo,
y mis casi nulas prácticas naturales al descubierto,
quedaron elocuentes cuando la miré acostada,
desnuda totalmente como una pintura célebre,
brindándome toda su gallardía femenina a la que,
en principio sólo atiné a acariciar sus hermosos senos,
y luego me tomaba con sus piernas y su jardín acaricié.
Mientras me besaba y bebía el néctar que su pasión,
comunicaba a mi sexo enarbolado como nunca lo sentí,
toda la magia de lo prohibido y encantador que un joven,
adolescente pueda sentir estando sobre la mujer que,
quería hacerme crecer y madurar como hombre,
al dejarme hacer todo lo que mi mente me mandaba,
sin saber si estaba bien, pero la naturaleza… es la naturaleza.
En esa experiencia de frenesí y loca pasión,
desperté con una luz de un nuevo amanecer,
a las ansias de seguir amándola creyendo estar enamorado,
pero fue duro mi despertar… cuando me aclaró,
abrazándome fuerte nuevamente a su pecho,
“Yo tan solo buscaba que me dieras tu fuerza de principiante,
Y que mi cuerpo se satisficiera de ti y tus ansias de querer amar”.
Hoy y mirando en la distancia,
Aún la recuerdo y de lo brillante,
intemperante amanecer sexual (Agradecido).
Oskyflors
oskyflors@yahoo.com.ar
Marzo 29. 2014
Derechos Reservados del Autor 2014
San Juan – REPÚBLICA ARGENTINA.
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