CONOCERTE
Apareciste de la nada intentando pasar desapercibida, pero tu presencia con una invitación fue recibida; rebusque en tu muro y allí estabas tú con tus aficiones y recelos a la vida, decidiéndome a conocerte sin saber como reaccionarías...
Una rosa imaginaria robada al cielo te mande, y tus palabras me llegaron atropelladas con timidez, mientras un mundo de color con mis versos de humilde poeta te entregue, para que la amistad entre tu y yo se abriera paso con ganas de crecer...
Tu confianza para mi se convirtió en mi mayor tesoro, guardándolo en silencio me sentí tan dichoso, que tu sinceridad me animo a seguir siendo tan respetuoso, con tus sentimientos de mujer herida y corazón hermoso...
A partir de aquí risas, llantos, penas y alegrías; separados por un océano físico pero mentalmente en cercanía, desbordando mares de ilusión compartida, como dos enamorados en alta mar al despuntar el día...
Y en secreto robándote besos delante del teclado, de miradas fugaces a fotografías que dibujan emociones de lado a lado, entre buenos compañeros de viaje sin ningún reclamo, nos queremos y nos respetamos por encima de todo como dos buenos amigos sin estar a un juramento atados...
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